Actualmente estamos asistiendo a un proceso incipiente de transformación digital de la sociedad, en el cual la el 5G juega un papel determinante. La evolución tecnológica y la alta competencia empresarial han conseguido que todo tipo de empresas, independientemente el tamaño, sector o mercado, estén preocupadas por su transformación digital.

La digitalización se ha convertido en uno de los ámbitos de negocio más dinámicos y con mayor potencial de crecimiento, haciendo que los actores y empresas del sector tengan que evolucionar con rapidez para ganar posiciones en la carrera por conseguir la mayor cantidad de ingresos previstos.

Uno de los aspectos más importantes para alcanzar una alta digitalización de la sociedad y de las empresas será el “Internet de las Cosas”, más conocido como IoT. La evolución tecnológica de dispositivos de sensores y dispositivos de comunicación, está haciendo que en los últimos años cualquier “cosa” pueda estar permanentemente conectada a un sistema con el que comunicarse y compartir información. IoT permitirá digitalizar de forma masiva prácticamente  todo lo que ocurre a nuestro alrededor, así como digitalizar la mayoría de los procesos de las empresas.

Tanto la digitalización como IoT llevan varios años desarrollándose y consiguiendo transformaciones relevantes en nuestra sociedad.

Sin embargo, los sistemas actuales de comunicación tienen aún ciertas limitaciones de velocidad, latencia o número de dispositivos conectados que en determinadas situaciones impiden una evolución más rápida de la digitalización. Es en esto punto donde 5G aparece como una de las piezas claves de la transformación digital, su mejora tecnológica respecto a sistemas actuales como 4G permitirá la introducción masiva de sistemas conectados, con un incremento significativo en la velocidad y disminución de los tiempos de latencia.

5G: Digitalización

La digitalización de nuestra sociedad, así como de nuestro entorno productivo y empresarial, supone un proceso que no solo lleva asociada la digitalización y automatización de actividades y por tanto una evolución de sistemas, sino que requiere también de cambios organizativos y culturales. La Transformación Digital requiere cambios en las personas, en la estrategia de las compañías, en los modelos de relación de una empresa con sus clientes, etc.

Esta transformación permitirá a las empresas mejorar drásticamente su competitividad por medio de procesos más eficientes, incrementará la capacidad que las compañías del futuro tendrán para crear nuevos productos y servicios, facilitará la expansión geográfica. Como consecuencia, están surgiendo enormes oportunidades de negocio para empresas de Tecnológicas. El número de proyectos, productos y servicios de digitalización crece día a día, haciendo que estas compañías tecnológicas presenten unas previsiones de crecimiento exponenciales.

Según Arthur D. Little hasta 2026 la digitalización supondrá un crecimiento medio anual de más de un 13% en los ingresos del sector de empresas tecnológicas. Estos ingresos se obtendrán de la digitalización de prácticamente todos los sectores industriales (Utilities, Seguridad, Fabricación, Servicios Financieros, Salud, Transporte Público, Media y entretenimiento, Automoción).

5G: IoT- Estado actual

Actualmente el IoT ya está siendo uno de los factores transformadores de la industria. La evolución tecnología en este campo está haciendo que cada vez aparezca un mayor número de dispositivos conectados, con mayores capacidades de conectividad y más asequibles. IoT ya está presente en multitud de sectores industriales, sistemas de telemetría, sistemas de localización, monitorización del comportamiento de clientes, monitorización de procesos industriales, automoción, etc. Algo que ya genera beneficios a la industria y en general a la sociedad. Se puede mejorar la productividad de los trabajadores, mejorar la experiencia de clientes, obtener de forma masiva datos de producción que permite optimizar procesos industriales, optimizar el consumo eléctrico de ciudades y hogares, etc.

Sin embargo, trasladar el potencial del IoT a casos reales aún sigue siendo un reto. Existen importantes barreras que impiden un despliegue masivo del IoT. Entre las más importantes, destaca la falta de estándares tecnológicos que permitan la coexistencia de distintos sistemas con unos requisitos de seguridad mínimos. Sin unas especificaciones técnicas comunes se hace necesario el desarrollo de aplicaciones y sistemas de conectividad específicos para cada solución, incrementando notablemente los tiempos de despliegue de dispositivos conectados e impidiendo una introducción masiva de esta tecnología. Sin embargo, ya se está trabajando en resolver los problemas actuales del IoT, y el futuro es prometedor: Gartner estima que en 2020 habrá más de 20.800 millones de dispositivos conectados.

5G: Pieza clave en la transformación

Aunque actualmente la digitalización y el IoT ya es una realidad que ofrece importantes oportunidades de cambio, será la tecnología 5G lo que permitirá acelerar la transformación de la industria y de la sociedad hacia un mundo digital. Si bien tecnologías como 4G están ayudando a la incipiente digitalización, aún se hace necesario disponer de mayoras capacidades de comunicación. Entre las principales mejoras de 5G frente a 4G, conviene destacar las siguientes:

• La velocidad media de las comunicaciones aumentará entre 10 y 100 veces. Alcanzando velocidades máximas de hasta 10 Gbps.
• La latencia será 5 veces inferior.
• La Conectividad de 5G será entre 10 y 100 veces mayor en número de dispositivos conectados.
• El Consumo de Energía se reducirá en un factor de 1.000 veces menos por bit, aumentando por 10 la duración de las baterías.

A partir de estas capacidades, la tecnología 5G supondrá el despegue masivo de la digitalización y el IoT. Según estudio realizado por Arthur D. Little y Ericsson, coincidiendo con el despliegue de las redes de 5G, los ingresos de las empresas tecnológicas generados por la digitalización pasarán de un crecimiento medio anual de un 12% hasta 2020 a un 14% de incremento medio anual entre 2020 y 2026.

Incrementos que tendrán un impacto relevante en los ingresos de los operadores de red, cuyo crecimiento medio anual de ingresos sin tener en cuenta 5G sería de un 1,5% y sin embargo el despliegue de 5G proporcionará un potencial de crecimiento de ingresos de un 34% en 2026.

5G: Casos de uso

Las necesidades específicas de diferentes tipos de servicio que ofrecerán las redes de 5G hacen conveniente diferenciar la demanda por tipo de cliente, de esta forma se introduce el concepto de “Use Cases”. Encontraremos por ejemplo servicios donde la latencia sea clave para el servicio, otros servicios donde sin embargo la latencia no sea relevante y sin embargo sea clave la conectividad de un número elevado de dispositivos por m2, etc.

Para ilustrar mejor este concepto a continuación se recoge un ejemplo de cómo la digitalización, IoT y 5G pueden transformar la industria manufacturera.

La fabricación se encuentra en uno de los entornos de mercado más complejos, con una hiper-competencia producida por un mercado global y con una alta volatilidad en la demanda de productos (menores ciclos de vida, fluctuaciones en la demanda, etc.). Ante esta situación el futuro pasa por conseguir la “Smart Factory”:

• La digitalización permitirá mejorar los procesos de fabricación
• IoT posibilitará un mayor control
• Análisis predictivo
• Dispondrá de sistemas mucho más flexibles
• Se incrementará la automatización de los procesos industriales

La digitalización apoyada en la tecnología 5G mejorará campos de la fabricación como: 

• Sistemas automatizados y control industrial. Control remoto de robots, vehículos guiados automáticamente.
• Sistemas de planificación y diseño. Simulación de procesos de fabricación por medio de sistemas de fabricación virtual.
• Dispositivos de campo. Recopilación y monitorización masiva de datos por medio de sensores, monitorización de la producción y video vigilancia.

Un ejemplo de caso de uso de fabricación sería la operación y mantenimiento de las máquinas de una cadena de producción:

• Cada máquina estaría conectada a la nube por medio de una tarjeta SIM.
• La máquina enviaría medidas sobre su funcionamiento al equipo de mantenimiento que permitirían hacer un mejor mantenimiento preventivo.
• Los técnicos de mantenimiento podrían controlar y reparar las máquinas de forma remota.

En definitiva, estamos asistiendo a una nueva revolución industrial que va a requerir una transformación de las empresas y de la sociedad.